Crías de hámsters

Crías de hámsters

Muchos de vosotros seguro que buscáis que vuestros hámsters procreen para tener pequeñas crías a las que ver crecer. Pero muchos otros se encuentran con la sorpresa de que la hembra que compró hace poco está embarazada y tendrá una camada a la que habrá que cuidad.

Para todos vosotros hemos preparado una guía con los cuidados que hay que tener con las crías de los hámsters. Conoceremos a la perfección las características de estos pequeños animales y analizaremos una serie de claves a tener en cuenta para que estas crías puedan crecer a la perfección.

Características de las crías de hámsters

Las crías de hámster nacen ciegas y sin pelos. Lo único que tienen alrededor de su cuerpo es una membrana. Esta membrana fetal es la placenta y la madre de las crías se alimentará también de ella. Además es importante que lo haga porque ésta contiene los nutrientes que le faltan a la nueva madre tras todo lo que ha perdido en el parto.

Desarrollo de las crías

Las crías no estarán desnudas durante mucho tiempo. En menos de una semana empezaremos a apreciar como los pelos hacen su aparición. Incluso será posible reconocer el color de su pelaje, color que será el definitivo cuando éstos sean adultos.

A las dos semanas aproximadamente las crías comenzarán a abrir los ojos. Como vemos poco a poco se irán sucediendo cambios importante, lo que hará especialmente emocionante el desarrollo de las crías.

Una semana o dos después de la apertura de los ojos, las crías de hámsters han alcanzado la madurez sexual. En este momento tenemos que realizar el destete de las crías si no lo han hecho de forma natural. Igualmente es importante separar a las crías por género, especialmente para evitar la endogamia (cría entre parientes cercanos).

Cuidados de las crías

Es muy importante que prácticamente no haya interacción entre nosotros y las crías durante al menos la primera semana de vida. Las madres son muy protectoras y están siempre atentas a sus pequeños. Si nos acercamos, éstas pueden mostrar un comportamiento agresivo con nosotros.

El mero hecho de tocar una cría puede alterar su olor, pudiendo hacer que la madre no lo reconozca como su pequeño, algo fatal porque se comportaría con el pequeño de una forma agresiva. No debemos de ninguna manera alterar a la madre, porque si ella se siente en peligro puede incluso matar a los cachorros para protegerlos.

Incluso ciegos, es normal ver a los pequeños hámsters explorando la jaula. No hay que preocuparse, ya que a pesar de ser ciegos tienen un excelente sentido del olfato que les permiten encontrar fácilmente el camino de vuelta con su madre. E incluso si no pudieran hacerlo, la madre irá a recogerlos.

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